Los cuatro caídos

Por Mauricio Gómez Buriticá
Twitter: @elmago_b
Minuto 72 del partido, cobro de tiro de esquina, el balón va con dirección al segundo palo, Giancarlo Carmona le gana la marca a dos rivales y con el borde interno de la pierna derecha impacta para vencer al arquero Sebastián Viera.

Esa anotación no sólo significó la victoria de Melgar de Arequipa, sino el entierro del Atlético Junior, equipo que, antes de la competencia, se perfilaba como el mejor colombiano en la Copa Libertadores.

La noche peruana no solo sentenció las posibilidades del equipo de Barranquilla, que acumuló tres derrotas consecutivas, sino que dejó por fuera de carrera al cuarto equipo colombiano (de los ocho en competencia), en los dos torneos continentales: Copa Libertadores y Copa Sudamericana.

Los primeros en quedarse por fuera de la Libertadores fueron Atlético Nacional y Deportivo Independiente Medellín, a manos de Libertad de Paraguay y Palestino de Chile, respectivamente. Ambos equipos ratificaron en la cancha que no estuvieron a la altura de la competencia. Y luego, el turno fue para el Once Caldas que, para sorpresa de todos, fue superado por un equipo sin ribetes, el Deportivo Santaní, también del Paraguay.

Estas prematuras eliminaciones han desnudado el pobre nivel de un fútbol que ha perdido en cuatro años el respeto continental ganado por equipos como Independiente Santa Fe (Hoy colero del torneo local), Atlético Nacional y el propio Junior que, hace apenas cuatro meses, jugó la final de la Copa Sudamericana 2018.

Semejante descalabro ha dejado en evidencia el bajo rendimiento del fútbol colombiano a nivel de clubes, lo que plantea un panorama poco alentador para los otros cuatro equipos que aún tienen  actividad copera (advirtiendo que a Junior le quedan tres partidos calendario).

De esta manera, solo resta esperar el desempeño del Deportes Tolima en la Copa Libertadores y el de La Equidad, Rionegro Águilas y Deportivo Cali en la Copa Sudamericana.

Tolima enfrentará este miércoles en Ibagué (7:30 de la noche), al boliviano Jorge Wilstermann. Los dirigidos por Alberto Gamero acumulan una victoria en casa ante Athlético Paranaense y una derrota en Buenos Aires ante Boca Juniors.