¡Un entierro de quinta!


Un mediocre equipo como Deportivo Pereira no puede tener un funeral de Estado, sólo puede aspirar a un entierro de quinta. Y peor aún, fue el mismo Pereira el que cavó su propia tumba

Mauricio Gómez Buriticá
En twitter: @elmago_b
No es fácil tener que sentarse a escribir después de un partido en el que, además de ver a su equipo jugar sin alma en la cancha, el resultado representa la eliminación del campeonato.

Lo de anoche del Deportivo Pereira fue un entierro de quinta y eso que fue el mismo Deportivo Pereira el que cavó su propia tumba. Lo digo porque hoy el conjunto matecaña está eliminado fruto de sus propios errores y por la incapacidad de jugar a la altura de la exigencia de unos resultados.

Lo que mal comienza, mal termina: Que el partido a puerta cerrada, que uno de los transformadores del estadio averiado desde la semana pasada, que la fuerte lluvia que dejó ver imperfectos en la cancha, que el retraso en el comienzo del partido por falta del suministro de la luz eléctrica; en fin, que una cosa y que la otra.

Todos esos hechos sirvieron de preámbulo al desastre futbolístico de un equipo que anoche rayó en la mediocridad y de colofón para una pobre campaña que no dio ni para pelear hasta lo último.

Una vez más el Pereira cedió terreno en casa, con el empate de ayer ya son 13 los puntos que dejó de sumar en el estadio Hernán Ramírez Villegas. Hasta aquella época en la que decíamos que el conjunto matecaña era inexpugnable en casa, ya es pasada.

Trato de pensar con cabeza fría, pues al calor de un mal resultado a veces es fácil caer en imprecisiones y asumir posiciones poco objetivas, pero en realidad, por donde se le mire, la situación deportiva del equipo no da para disimular el fracaso y mucho menos para engañar al hincha.

A veces me da por pensar que en la ciudad tenemos el equipo que nos merecemos. Sin embargo, me pongo en el zapato del aficionado que sufre y del periodista que siente como propio el éxito o el fracaso del equipo y termino por concluir que no es el equipo que nos merecemos.

Ya sea desde la óptica del periodista crítico o condescendiente, o desde la mirada del hincha que apoya ‘a muerte’ o del apático desencantado; un equipo mediocre como Deportivo Pereira no puede, de ninguna manera, jugar con la ilusión de unos y los intereses de otros.

¿Qué podemos hacer hinchas y periodistas cuando en la cancha el que tiene que escribir la historia de un partido olvida hasta lo que es ser digno? Hay excepciones, por supuesto, pero en la mayoría de los casos los jugadores del Pereira dejaron al lado la dignidad, esa dignidad de morir con las botas puestas.

Ya habrá tiempo de más reflexiones de parte nuestra, aunque lo que verdaderamente esperamos son decisiones, decisiones acertadas de quienes tienen que tomarlas. Mmm! ¿Será que son ellos, los que toman las decisiones y verdaderamente mandan en el equipo, los verdaderamente responsables?

Comentarios

  1. Lo que paso anoche en el estadio no me sorprendió mucho ni me puso a sufrir, sabiendo que soy un hincha fiel que mientras pude fuí al estadio y que hoy en dia en a lejanía (Jacksonville, Fl, USA)sigo al equipo de todas las formas posibles, aun así la pasion ya no es la misma, ese sentir orgullozo de que no se es hinca del mejor equipo pero que se sabe que al menos luchas por defender los colores de la hermosa ciudad que es pereira ya no se siente, y esto no me paso anoche ni desde que se fue en picada el equipo con ese tecnico ecuatoriano autosuficiente egocientrico que tenia, ese desencanto lo senti en diciembre del año pasado cuando me di cuenta de como descaradamente el Deporivo Pereira se habia regalado en un partido rarisimo en la costa que perdio 3-0 como queriendo decir "hasta aquí llegamos nosotros, espero les halla gustado", sin ser el mas conocedor creo que ya se ve de lejos que a los dueños les intereza un equipo en la b, y desde que eso sea asi, no lo vale hacerle la fuerza a un equipo que se sabe que no va a luchar por lo que uno quiere.
    Att:Pipe Cuartas
    @pipe811

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